Estadística

domingo, 6 de noviembre de 2011

Interludio

Golpea la vida con un vaso de vino, camarada. Aspira la energía que se amontona en los cristales. Llora solo los días de lluvia, y solo para solidarizarte con una sociedad que se moja por fuera, pero que sigue siendo impenetrable. Qué más da si no recuerdo el color de sus ojos, me siguen quedando sus miradas, atesóralas bien , porque es lo único que conservas, porque es lo único que alguna vez has tenido, y lo único que siempre tendrás.

Si no consigues dormir, escribe, mastúrbate, o deléitate con el silencio. Da igual como boxees contra tus demonios, tan solo golpéales con fuerza hasta que a tus ojos no les quede aliento. No dejes nunca que te arrastren a la nada. Puede que aquí nada merezca la pena, pero seguro que allí tampoco.

Siente la vida pringándote los dedos y el abdomen. Arriésgate, juégatelo todo y orina sobre quien llame a tu puerta con facturas del pasado. Combate el fascismo en las conciencias y en la cama Lucha, lucha y sigue luchando, hazlo por ti, por la revolución y por ella. Llámala cariño, mama o socialismo todas son buenas razones para querer cambiar el mundo

Y es que no hay luna esta noche, solo ruido, golpes y gemidos a lo lejos, delirios de alcohol, ojos que no se cierran. Y un grupo de hermanos que apuran una botella cantando. Esta noche no está estrellada, la luna se ha ido con otro, el whisky se ha acabado, y en la esquina una princesa sonríe a indignos cabaleros de armadura de seda y yelmo engominado.

Hay una ciega armada y sin camisa que se ríe de ti burlona, un mundo que gira sin pedirte permiso, una orgía en algún sitio en el que nos echan de menos.

Las ideas se apagan y se encienden a lo lejos. La noche avanza y el sueño esquiva mi cama, el muy cabrón me niega otro polvo, me recuerdo a aquella chica que como no soñaba con migo y me prohibió soñar con ella.

Y ahí fuera está la lluvia golpeando en la ventana, bestia furiosa de cuerpo húmedo que se retuerce frente a la luz de las farolas. Que te atrae con su canto, para ahogarte entre sus húmedas piernas

Aquí dentro hay frio sudor y humo. Hay honor y amor en mi cabeza, conceptos preciosos que aun respiran pese a estar empalados en mi hígado, un campo estéril y salado, que fue devastado por las hordas de la vida. Dónde dejé la botella, dónde estas ahora cariño has cambiado de país, cual es ahora el tacto de tu pelo, de que color será tu sonrisa, preguntas absurdas porque los dos sabemos que yo te amaré igualmente, y que tu simplemente algún día te acabarás dejándome bonitos recuerdos difuminados y una resaca insoportable, ¿han visto ustedes una pequeña bolsita de vida color muerte? No te ofendas cariño, esta nueva amiguita no es comparable a ti, pero al menos no me duele tanto cuando ella se va.

El sueño no viene, ella no está, la vida se acaba, ya no me queda dinero para comprar más. Que más da. Ya robaré unos besos más, unos tragos, un poco de humo. Todo forma parte del mismo tanatos vital, la misma mierda que sale, fluye, se va por el desagüe y te mantiene vivo. Algo

1 comentario:

  1. Puff menudo torrente de palabras, delirante, brutal, como un chupito de absenta de sentimientos apurado de un trago. Brillante y descarnado.

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